Hay experiencias que son tan enriquecedoras que queremos repetirlas una y otra vez. Eso mismo debe de pensar Andrés Morate, dueño de la primera bodega ecológica de la Comunidad de Madrid, que repite por tercer año consecutivo en el Programa Cultiva 2022.

En esta edición, nuevamente financiada e impulsada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, con la colaboración de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA); la afortunada que ha podido visitar la explotación de Andrés Morate ha sido Rosa Ana, una joven agricultura de Albacete con muchas ganas de aprender para seguir desarrollando su proyecto personal. Hablamos con ella para ver qué le ha parecido esta experiencia y si ha cumplido con sus expectativas.

Háblanos un poco de ti… ¿Cuál es tu proyecto/experiencia y qué te llevó a querer dedicarte a la agricultura?

Soy Rosa Ana, mi proyecto está en Albacete y lo que me llevó a dedicarme a la agricultura es poder vivir de lo que me gusta, el campo, para no tener que abandonar ni mi pueblo ni las tierras de mis abuelos.

cultiva 2022 madrid¿Por qué te apuntaste al programa CULTIVA? ¿Qué es lo que te ha motivado a ello?

Me apunte a CULTIVA (y me volveré a apuntar) motivada por obtener conocimientos, para aprender y escuchar puntos de vista diversos de agricultores, cooperativas vinícolas, centros de investigación, asociaciones… Quiero obtener una base teórica y práctica que pueda aplicar a la agricultura.

Has elegido acudir a la explotación de Andrés Morate, dedicada al viñedo ecológico. Cuéntanos, ¿por qué la elegiste y qué relación tiene con tu propio proyecto?

La elegí por estar relacionada con mi propio proyecto, por ser ecológica y por el tipo de cultivo que trabajan: vid y olivo. También, porque tienen bodega propia y porque el clima es parecido al de mi zona.

Entre otras cosas, has podido ver el modo en que gestionan la explotación, desde la poda de vides hasta la cata de vinos en las bodegas de la finca. ¿Qué parte te ha sorprendido más?

Me ha sorprendido todo. Que todo proceso sea ecológico, sostenible con el medio ambiente, respetando en todo momento al campo, al producto, la elaboración, el embotellado, la distribución y, al final, a los clientes. Me ha sorprendido también que todas las viñas sean en vaso, con vendimia a mano, que sean totalmente autosuficientes, que tengan su propia bodega y que sea un proyecto familiar que realizan con mucho mimo, pasión, inteligencia, curiosidad y ganas de trabajar el campo.

Durante tu estancia has podido visitar la Finca El Encín (perteneciente al IMIDRA) y su museo ampelográfico y bodega experimental. ¿Qué es lo que más te ha llamado la atención de tu visita?

Me ha llamado la atención la gran cantidad de variedades de vid que albergan, las múltiples investigaciones que se llevan a cabo sobre diferentes cultivos y los distintos tipos de racimos de uva que tienen perfectamente conservados en botes formol. Es un sitio alucinante al que quiero volver para ver y descubrir todo su potencial.

Me ha sorprendido todo. Que todo proceso sea ecológico, sostenible con el medio ambiente, respetando en todo momento al campo, al producto, la elaboración, el embotellado, la distribución y, al final, a los clientes.

¿Qué te ha parecido la experiencia en el Programa Cultiva en términos generales?, ¿crees que podrás trasladar los conocimientos aprendidos a tu propio proyecto a corto/medio plazo

Me ha parecido una experiencia buenísima, muy enriquecedora. Se aprende mucho y cosas muy útiles, que se pueden trasladar de inmediato y a largo plazo a cada proyecto.

Para acabar, dinos, ¿recomendarías vivir una experiencia similar a otros compañeros de profesión?

Recomiendo la experiencia 100% a todos los agricultores que quieran aprender y ampliar conocimientos.