Seguros

Los seguros deben cubrir los riesgos importantes en una explotación agraria, y suponen un gasto nada desdeñable, por lo tanto, han de ser objeto de estudio detenido y se ha de adoptar la decisión más conveniente siguiendo criterios estrictamente profesionales.

Si para cualquier agricultor o ganadero los seguros son importantes, para aquellos que inician la actividad son IMPRESCINDIBLES.

Asegurar la actividad económica de la que dependes es importante. Recuerda que en la mayoría de los casos la actividad agroganadera se desarrolla al aire libre, por lo que está expuesta a muchas circunstancias y fenómenos meteorológicos como:

  • Pedrisco
  • Heladas
  • Sequías
  • Inundaciones
  • Golpes de calor
  • Viento
  • Fauna salvaje

Si eres ganadero, cobran especial relevancia: 

  • Las enfermedades infecto-contagiosas objeto de saneamiento en las campañas oficiales de saneamiento ganadero (tuberculosis, brucelosis …) 
  • Los accidentes
  • Los daños ocasionados por la fauna salvaje
  • Los problemas en los partos, infecciones mamarias y otras enfermedades comunes 
  • La retirada de cadáveres de la explotación

Pero si, además, eres joven con pocos años en el sector los riesgos aumentan y la capacidad económica para enfrentarlos es pequeña, por lo que te animamos a que ASEGURES TU EXPLOTACIÓN

Para que tomar una decisión sobre el seguro que más te conviene te resulte más sencillo, te recomendamos que visites la herramienta de simulación de seguros que ha diseñado CAMPOSEGURO y que puedes consultar de manera gratuita haciendo clic AQUÍ

El seguro agrario en España está basado en la intervención conjunta de instituciones públicas y privadas, tiene carácter voluntario, se realiza bajo la fórmula de pool de coaseguro (actualmente 22 compañías forman parte del mismo bajo la razón social de AGROSEGURO) y cuenta con subvenciones estatales al productor para el pago de la prima. 

Aunque hay mucha variabilidad según el tipo de explotación, línea de seguro y coberturas, la media de subvenciones actualmente cubre el 42.4% de la prima del seguro y el 57,6% restante el agricultor o ganadero. En el próximo plan se va a duplicar la ayuda a la contratación de seguros agrarios por parte de jóvenes, pasando de 5 a 10 puntos porcentuales.

En la actualidad, existen coberturas disponibles para todas las producciones agrícolas frente a la práctica totalidad de los riesgos naturales, y este sistema está considerado como uno de los más exitosos y con mayores coberturas a nivel mundial. 

En la web CAMPOSEGURO podrás consultar las diferentes opciones de contratación, con las garantías que cubre y niveles de subvenciones según el tipo de explotación que tengas. 

Una figura importante en estos tipos de seguros es la del tomador de seguros. Por lo general, se trata de una organización agraria que contrata de forma colectiva, obteniendo ventajas tanto por la reducción del importe de la prima, como por la labor de información y asesoramiento de la figura del tomador. 

Los siniestros se tramitan a través del tomador y se peritan por técnicos tasadores independientes que paga la propia compañía Agroseguro. El método de peritación de cada una de las producciones está establecido de forma oficial y el asegurado puede mostrar su disconformidad con las peritaciones y solicitar una segunda peritación nombrando perito de parte.

Hay fórmulas financieras para demorar o fraccionar el pago de la póliza. En este sentido, cabe destacar el aval de SAECA para fraccionar el pago, un aval fácil de gestionar.

Puedes ampliar la información en los siguientes portales: 

Se tratan de seguros que cubran los bienes que tiene un agricultor y/o ganadero. Fundamentalmente, las naves agroganaderas con el valor, si es el caso, de los animales y los productos de la cosecha y medios de producción almacenados, la maquinaria y los equipos usados para el riego.

El seguro ha de cubrir los riesgos más habituales, como son los de robo, catástrofes naturales, incendio, daños eléctricos, y cubrir los riesgos de la responsabilidad civil ante terceros.

Este tipo de seguro no es obligatorio y no se puede suscribir a través de AGROSEGURO, pero es interesante tenerlo presente porque cubre el riesgo de provocar daños en propiedades de terceros. 

Se trata de coberturas pensadas fuera de la circulación por carretera de los vehículos, es decir, cuando se está desempeñando la labor en el campo. Por ejemplo, podemos citar los daños en el sistema de riego, o daños en un tendido eléctrico o fibra de telecomunicaciones, un incendio en la maquinaria que se extiende a cultivos, inmuebles o fincas foresta­ les, daños en la obra civil de un almacén al maniobrar, etc.…

Los seguros de responsabilidad civil del ganado se pueden suscribir para cada actividad ganadera en concreto, salvo que ya esté contratado en la propia póliza del seguro de explotación. Cubrirían, por ejemplo, los daños provocados por el ganado cuando se sale de la cerca y comen una parcela ajena, o los posibles accidentes provocados por los animales domésticos…

Igual ocurre con la responsabilidad civil que pudiera derivarse de daños provocados por los perros utilizados como animal de guarda en la explotación agroganadera (mordeduras, accidentes, etc.…).

El seguro de vida garantiza el cobro de una cuantía económica cuando se produce una situación de invalidez o de fallecimiento, siendo en este último caso beneficiarios los herederos o personas indicadas por el tomador de la póliza. En ocasiones, es un elemento que las entidades de crédito imponen como garantía de devolución del préstamo. 

Un joven que se incorpora a la actividad debe pensar en los riesgos que asume y en que, probablemente, tiene más riesgos en los primeros años de su desarrollo que después cuando ha adquirido más experiencia. Por ello, es recomendable reflexionar sobre la oportunidad de contratar un seguro de vida y de accidentes que al menos le libere de las deudas que pueda haber contraído en el inicio de la actividad.