Esta semana el Programa Cultiva 2022 ha hecho parada en Galicia, más concretamente en Viana do Bolo. A este pueblo ourensano, se ha desplazado Albert, un joven ganadero que quería conocer y aprender de María Páez, dueña de una de las primeras granjas gallegas en animarse a digitalizar a su ganado mediante collares con GPS.

Tras esta intensa semana de aprendizaje, nos sentamos a hablar con ambos sobre sus inicios en el sector agroganadero y sobre cómo han vivido esta experiencia. ¡Empezamos con nuestro joven ganadero ilerdense, Albert!

¿Por qué te apuntaste al programa CULTIVA? ¿Qué es lo que te ha motivado a ello?

Por la insistencia de un amigo y, claro, por descubrir los distintos tipos de explotaciones agrícolas-ganaderas que hay en nuestro país.

Para pasar tu estancia has elegido la explotación de María Páez, cuéntanos, ¿por qué elegiste esta explotación en particular? ¿Qué tiene que te haya llamado la atención para elegirla?

Es diferente de las explotaciones ganaderas que he visto en mi zona, sobre todo, en el apartado de pastos extensivos.

Una de las características fundamentales de la explotación de María Páez y de la gestión de la misma es la implementación de dispositivos de geolocalización en todo su rebaño para poder monitorear su actividad, ¿qué te ha parecido esta tecnología? En tu caso, ¿cuentas con algún dispositivo tecnológico para ayudarte a desarrollar tu labor?

Me parece una tecnología imprescindible en su explotación para el control de sus vacas. En mi explotación contamos con GPS autoguiados en los tractores.

El Programa Cultiva es un programa muy bonito para ver y aprender de diferentes explotaciones por todo el país.

Albert Vall, joven participante en el Programa Cultiva 2022.

Además de la explotación de María Páez, también has podido visitar otras explotaciones gallegas de la zona, como la explotación AGRO NOVO SC y, de este modo, ver las diferencias entre el modelo extensivo de esta explotación y el intensivo de la explotación de María. ¿Qué destacarías de estos dos modelos?, ¿de la comparativa entre ambos?

Es un modelo totalmente diferente de producción de carne, sobre todo, en la rapidez del engorde y la cantidad de cabezas en un modelo intensivo.

En términos generales, ¿qué te ha parecido tu experiencia CULTIVA 2022?, ¿crees que podrás trasladar los conocimientos/experiencias aprendidas a tu propio proyecto/explotación a corto/medio plazo?

El Programa Cultiva es un programa muy bonito para ver y aprender de diferentes explotaciones por todo el país. En cuanto a lo aprendido durante esta estancia, creo y espero poder aplicar todo lo que me ha enseñado María en mi futura explotación ganadera.

¿Recomendarías vivir una experiencia similar a otros compañeros de profesión?

Sí, les insto a no tener miedo y salir de su zona a aprender de otros compañeros.

¡María Páez es una mujer de campo desde la cuna! Criada entre vacas en la explotación de su madre, estudió una ingeniería forestal y trabajó de ello, hasta que en el año 2016 se puso al frente del negocio familiar hasta multiplicar las cabezas de ganado. Hablamos con ella de su historia, de qué le ha llevado a participar en el Programa Cultiva y cómo ha sido esta nueva experiencia.

Háblanos un poco sobre ti… ¿En qué consiste tu proyecto y cuánto tiempo llevas trabajando en el sector? ¿Cómo fueron tus comienzos?

Mis comienzos son desde que he nacido porque mi madre ya tenía vacas y siempre me llevaba con ella. Pero realmente el comienzo como titular de la explotación fue en el año 2016. En un principio hice una ingeniería forestal con idea de dedicarme a ello, incluso empecé a trabajar en una organización agraria, pero en el 2016 la explotación que regentaba mi madre había bajado a 15-16 cabezas y me puse yo al frente, hice una incorporación y con un plan de mejora podemos tener la explotación que tenemos ahora con 40 cabezas madre.

Los comienzos fueron difíciles porque las cosas con las que contábamos eran diferentes a lo que necesitábamos, pero también hay que tener claro que sin esos inicios no tendríamos lo que tenemos hoy. Es una explotación familiar porque yo soy la titular, pero con la ayuda de mi hermano en las campañas grandes. Además, mi madre aún nos echa un cable. 

¿Por qué te ofreciste a participar dentro del programa CULTIVA 2022? ¿Qué características crees que tiene tu modelo de explotación que pueda interesar a los jóvenes que participan en el programa?

Una cosa de las que me impulsó a participar es que realmente esto me gusta y me siento orgullosa de hacer lo que hago. Hay gente que empezó cuando yo empecé o un poco más tarde y me gustaría que vean lo que estoy haciendo y compartir experiencias con lo que están haciendo ellos, aprender de los compañeros que vengan y enseñar lo que yo sé.

Además, mi explotación ha participado en un proyecto de digitalización de los animales y me parece interesante porque a mí me ayudó mucho en el día a día y me gustaría que la gente vea cómo trabajo y lo que hago.

Para mejorar la incorporación de jóvenes lo que necesitamos es darles la información, pero información real. Tenemos que ser realistas. No le podemos contar películas a nadie porque cuando le cuentas películas a la gente, al final cae gente en el sector que no va para delante. Es mejor que se incorporen diez y que sigan los diez, a que se incorporen cien mil y que vaya uno para delante.

María Páez, ganadera gallega.

Una de las características principales de tu explotación es la utilización de dispositivos de geolocalización en tu rebaño para poder monitorear su actividad, ¿por qué decidiste hacerlo de este modo?, ¿qué ventajas te ofrece?

Empecé a usarlo por un proyecto y gracias a ese proyecto piloto pude probar los gps y digitalizar la explotación, los animales sobre todo. Me pareció interesante porque mi explotación es bastante extensa, los animales andan sueltos y para controlarlos antes me pasaba 2-3 horas para localizarlos y ahora voy directa a dónde están, sé en cada momento dónde están. Además también me ayuda con otros parámetros como, por ejemplo, a tener localizadas a las vacas próximas al parto o si se mueve mucho un animal sé que puede ser por el ataque de un lobo, que ya he tenido alguno.

Hemos podido verte y oírte en distintos medios de comunicación hablando sobre problemas como la despoblación o sobre la escasez de mujeres como jefas de explotación, ¿has notado cierta mejoría al respecto? 

Sobre todo tenemos que estar orgullosos de lo que hacemos. Cuando estamos orgullosos y luchamos por ello, al final, siempre sales para adelante. Pero sí que encontramos muchas trabas. Si cada vez somos menos en el medio rural disminuyen los servicios y, si esto pasa, estamos desamparados.

Yo vengo de una explotación que ya regentaba mi madre y hay momentos difíciles, pero también buenos. Yo creo que luchando y tirando hacia delante siempre salen las cosas.

¿En tu opinión, qué cambios habría que llevar a cabo para mejorar dichos problemas?

Para mejorar la incorporación de jóvenes lo que necesitamos es darles la información, pero información real. Tenemos que ser realistas. No le podemos contar películas a nadie porque cuando le cuentas películas a la gente, al final cae gente en el sector que no va para delante. Es mejor que se incorporen diez y que sigan los diez, a que se incorporen cien mil y que vaya uno para delante. Todos tenemos derecho y todos tenemos fuerza para poder crear una explotación, pero es muy importante saber valorar el medio, saber dónde estamos y tener la cabeza bien fría. El que se incorpora al sector tiene que saber con lo que viene, a lo que se atañe y vivirlo. Aquí no es, hago esto hoy y aquello mañana. Nunca sabes lo que vas a hacer dentro de cinco minutos ni mañana, todo va sobre la marcha y las cosas salen bien o salen mal. Tienes que ser muy fuerte y tirar para delante.

Volviendo a CULTIVA 22, ¿qué detalle destacarías por encima del resto en relación con la visita y experiencia de la que has formado parte? ¿Has aprendido algo de ella?

Me he dado cuenta de que a muchos kilómetros hay gente que piensa cómo yo y trabaja como yo, aunque sea en otro sector o parecido. Pero, sobre todo, me he dado cuenta de que cuando la gente viene del sector, se ha criado en el sector, se nota.

Por último, ¿recomendarías a otros profesionales del sector que se ofrezcan a enseñar su explotación a otros agricultores o ganaderos?

¡Por supuesto que sí! Es una experiencia que no hay palabras para contarlo porque aprendes mucho y puedes enseñar mucho también. Hay cosas que no voy a olvidar.Esta semana se ha pasado en cinco minutos y eso es porque realmente ha sido fructífera. Por eso, se lo recomiendo a todos los que puedan apuntarse. Yo volvería a repetir.
El Programa Cultiva es un proyecto que cuenta con la financiación del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, junto con la colaboración de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), para que jóvenes agricultores/as y ganaderos/as mejoren su formación como profesionales del campo mediante experiencias formativas gratuitas en explotaciones “modelo” que abren sus puertas para transmitir su experiencia y su conocimiento.